viernes, 1 de octubre de 2010

Reflexión sobre donde estamos

    La verdad es que lo primero que se me viene a la cabeza, cuando intento recordar las experiencias satisfactorias que he vivido en el plano educativo, es toda la gente que he conocido, independientemente de que se forjará una amistad o no, ya que como dicen en la diversidad esta el gusto; es tan importante compartir una identidad con otras personas, sentir que tus ideas también las tienen otras, como conocer gente que pensando de forma diferente a la tuya te haga cuestionar en algún sentido las ideas preconcebidas, porque el conocimiento así como la verdad no es propiedad de nadie. Otra experiencia gratificante es cuando un profesor consigue motivarte de tal forma en lo que esta explicando, que estás ansioso de llegar a casa y continuar aprendiendo sobre ese tema; o cuando llegas con unas ideas preconcebidas sobre un tema en cuestión, y el profesor te demuestra que estabas equivocado o que se puede mirar desde otra perspectiva también válida. Es como si estuvieras en el campo y sólo mirarás a un árbol, de forma que no pudieras ver nada más que a este, y de repente te quitarán el árbol de enmedio y pudieras descubrir la inmensidad del campo (en este caso del cto); me refiero con esto a que te enseñen a pensar por ti mismo, sin que nadie te influya, sabiendo como decían los sofistas que todo depende del cristal por el que lo mires, que todo es relativo. 
    
    Una de las razones por las que elegí la carrera que estoy haciendo, es que "toca" muchas disciplinas diferentes, de manera que abarca un conocimiento muy amplio, lo que te permite si tienes ambiciones de conocer adquirir una buena formación, y sobre todo aprender. Pero desde luego lo más gratificante es el autodesarrollo personal y social que vives; personal porque al conocer gente diferente a ti (no sólo en las ideas, sino también en la cultura, en el idioma,...) te estás formando como persona, además de los propios conocimientos que estás adquiriendo que son fundamentales para tu formación educativa, y sobre todo para la vida en sí (no sólo mirando hacia la búsqueda de un trabajo); y social porque al conocer gente te abres a la sociedad.  

    Si nos fijamos en los momentos negativos desde luego el peor sin duda alguna, es cuando te encuentras con un profesor que utiliza de mala forma su poder, que no tiene ética ninguna; no me meto en si hace bien o mal su trabajo, simplemente en que por el mero hecho de ser el profesor, y tener más conocimientos que sus alumnos, los ningunea como si no fueran nadie, olvidando que tan importante es él como ellos. Tampoco es satisfactorio que un profesor no intente motivar a sus alumnos, que les ambicione en pos del conocimiento; pero eso tiene mucho que ver con la dejadez en sus labores del propio docente (muchos no se "curran" su trabajo), lo cual sirve de impedimento a la motivación del alumno. No se fomenta en las clases la participación del alumno, como si este no pudiera aportar nada, no se nos deja en muchos casos desarrollarnos como estudiantes, y la verdad para que un clase funcione correctamente, es necesario tanto la participación de uno como de los otros, porque ambos salen ganando. Quizás a todo esto no ayuda nada la fama que nos hemos ganado, el esteorotipo de que vamos a lo fácil, a aprobar y ya esta.

    Mirando en la metodología de la propia carrera, lo que no me gusta es que no hay una correspondencia entre teoría y práctica, es decir, adquirimos unas ideas sobre determinados aspectos pero luego no los ponemos en práctica en la realidad (la teoría no va acompañada de la práctica), entonces de que nos sirven; y muchas de las cosas que aprendes no tienen su correspondencia en la vida real, en el sentido de que estamos viendo como deberían ser las cosas en el plano político, pero luego ves lo que hay en la calle y no tiene nada que ver. 

    Para evitar que las experiencias negativas se superpongan a las positivas, es necesario tomar medidas y viendo los aspectos negativos es fácil vislumbrar cuales serían las posibles soluciones para en la medida de lo posible poder evitarlos. Lo principal es que los profesores desarrollen el espiritú de búsqueda de sus alumnos, es decir, que estos tengan ambición por conocer, para ello deben de trabajarse sus clases, y sobre todo saberse trabajar a sus alumnos. Todo esto implica no ningunearles, sino que haya una reciprocidad entre ambos, para ello hay que fomentar la participación en clase (a través de debates) porque si el alumno participa en el transcurrir de la clase, expone sus opiniones, se equivoca, lo corrige,etc, se estará afianzando la autoconfianza del mismo, y esto será un punto más para que el alumno se motive, porque una persona que confia en sus posibilidades rendirá mejor y ansiara en este caso saber más. 

    Desde luego se tiene que ver al alumno como un todo en si mismo y no como una parte de algo; nos tienen que tratar como personas y no como máquinas; y especialmente tienen que evaluar el esfuerzo y no la listeza. Por eso lo fundamental es cambiar la educación tan individualista que tenemos por una más grupal y transmitir a los alumnos (a los que lo toman así) que no están en una competición sino que están fundamentalmente para desarrollarse como personas y para desarrollar su formación, no para ganar a nadie. También creo que es importante que la teoría siempre vaya acompañada de su práctica correspondiente, para que el alumno sepa poner en liza en la vida real lo que ha aprendido.
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario